Hoy vamos a contarles los comienzo de la calle libertad, la cual concentra la mayor parte de la industria joyera del país. Para ello debemos remontarnos al actual banco Ciudad de Buenos Aires, ex Banco Municipal de Buenos Aires que era el sitio elegido por los vecinos de la zona para dejar sus joyas y relojes en caución en caso de necesitar de forma urgente efectivo para saldar deudas.
Había algunas veces en las cuales el empeñador no llegaba a tiempo para recuperar el objeto prendado por lo cual estos eran vendidos a los joyeros para su futura venta. Debido al beneficio que le representaba al joyero la compra/venta de estos objetos, estos se fueron asentando de forma estratégica en las cercanías del Banco Municipal sobre la calle Esmeralda. Actualmente podemos ver un vestigio de lo que fue en ese entonces la calle esmeralda gracias a las joyerías que aún permanecen allí.
¿Y cómo es que llegaron las joyerías a la calle libertad? Muy sencillo, los objetos prendados en su mayoría relojes y joyas necesitaban en algunas ocasiones ciertos arreglos, lo cuales eran caros de realizar sobre la calle Esmeralda, esto dió lugar a la instalación de talleres sobre la calle libertad la cual era conveniente por su precio y cercanía. Es así como la calle libertad pasó a transformarse de una calle con tiendas de ropa de segunda mano a una calle de talleres.
Luego más tarde debido a la merma de objetos empeñados se dió lugar a la definitiva instalación de joyerías en la calle libertad, ya que no había ninguna necesidad de seguir instalados alrededor del Banco Municipal de Buenos Aires.